domingo, 30 de agosto de 2009

Cádiz

Hace casi una semana que volví, pero han pasado tantas cosas en tan poco tiempo que he preferido recuperarme para volver a la actividad bloguera.
La semana amiguil en Cádiz tuvo de todo, incluida la sorpresa del año, después lógicamente de la llamada a la que hace poco me referí: en Conil, a la hora de desayunar tras una noche intensa, alguien me acarició el hombro a la misma vez que repetía no me lo puedo creer... Allí estaba, era el lolito último, el zurdo, áquel que prefería la amistad de chicas en lugar de embarcarse en relaciones amorosamente sexuales. No salía de mi asombro y haciendo honor a mi apodo chica del horóscopo, mi cabeza no dejó de imaginar que el destino le había puesto en mi camino por algo. Quedamos para vernos en Madrid. Y lo hemos hecho esta semana, dos veces: el jueves y el viernes. De los dos, prefiero la quedada del jueves, más íntima, más creativa, menos amistosa, menos casual. Ayer volvimos a hablar, aunque preferí no verlo. Lo dice Fangoria: menos siempre es más.

P.D. Saludos a mi única seguidora, de la que he aprendido mis primeros pasos blogueros y de la que tanto he de seguir aprendiendo...

domingo, 16 de agosto de 2009

Maletas

Estoy haciendo las maletas. Siempre me ha encantado escribir esa frase. Hoy, además es cierto. Me marcho de vacaciones a Cádiz con mis amigas. Salimos mañana temprano y hoy hemos quedado para ultimar preparativos y contarnos novedades. La mía, quiero decir, mi novedad, será la llamada del viernes y mi acierto en que no tenga ninguna noticia desde entonces. Del resto, más o menos parecido. Casi todas tenemos a alguien por el que sonreír, por el que desgraciadamente solo lloramos. En fin.
De Cádiz espero mucho sol y alcohol. Otra cosa será lo que en realidad suceda.
Me despido entonces hasta finales de agosto, fecha en la que volveré a este espacio deseosa de contar lo que vivimos en el sur de España.

sábado, 15 de agosto de 2009

Nervios

Ayer pasó. Casi diez meses después de su último sms, ha vuelto a contactar conmigo. Casi muero. Miles de recuerdos buenos y malos se agolpan en mi cerebro y provocan un nerviosismo tal que tan solo he podido dormir dos horas.
No solo me escribió, también llamó y me informó que volvería hacerlo hoy para vernos, siempre y cuando no se fuera de festival. Muerta, me quedé muerta. Mis nervios volvían a delatar mis sentimientos. No logré y creo que todavía sigo sin lograrlo, pensar con claridad.
Acabo de encender el móvil y deseo que suene cuanto antes. Sin embargo, algo me dice que no pasará, que como otras veces lo único que quiere es tantear, obtener información, limar asperezas, abrir una ventana, aunque ésta por el momento sea tan solo un ventanuco. Ayer lo conseguía. Y eso, muy a mi pesar, creo que le basta.

domingo, 9 de agosto de 2009

Zurdo

Me dijo que estaba cambiando el rumbo de su vida, que en lugar de salir a ligar, salía a cubrir una carencia que su grupo de amigos llevaba arrastrando algún tiempo, y era el no tener amigas. Su argumento fue para mi todo un reto. Desde el mismo momento en que pronunció este discurso, fruto por supuesto de un desamor todavía en plena ebullición, me empeñé en que deseara precisamente lo contrario de su promesa ridícula: que quisiera ligar conmigo. Muy al final de la noche, me lo confesaba, debía haberse mordido la lengua y dejar sus intenciones amistosas para cumplirlas a partir de hoy domingo. Prueba superada.
Esto fue suficiente como para llegar a mi casa, cerca de las cinco y media de la mañana casi tan contenta como una de las innumerables veces en las que facilito mi número de móvil. Volví a gustar a un zurdo, el imán para este tipo de hombres volvió a surtir efecto. Me alegro.

sábado, 8 de agosto de 2009

Naturaleza

Si tengo que describirme entre dos opciones: urbanita o campestre, sin duda me quedo con la primera. La naturaleza nunca ha sido lo mío. Sin embargo para que están las vacaciones si no para hacer lo contrario de lo que acostumbras.
El jueves Marise y yo nos decidimos a pasar un día de campo y elegimos el paraje de la Pedriza. Resolvimos perfectamente bien la llegada y asentamiento en el lugar, a pesar de que ambas nos hemos criado en asfalto, aceras saturadas y pasos de peatones. Orgullosas de nuestro logro, incluso pensamos en repetir la hazaña antes de que volvamos a cambiar de siglo.
Al margen de nuestra excursión colegial, la semana se me ha pasado en un pis-pas y ya estamos a sábado. Sábado segundo de agosto, por lo que se prevé noche tranquila, que creo que repetiré con Marise, siempre y cuando no me haya abandonado por su visita anual a su pueblo...

domingo, 2 de agosto de 2009

Disposición

Más de lo mismo. Otra noche de sábado pasada, bailada y reída. Nada más. Estuvimos en el sitio de los pétalos de nuevo, aunque esta vez fue peor que la primera: menos gente, menos diversión y por mi parte menos disposición.
Yo creo que he llegado a este estado anodino después de analizarme un millón de veces durante los últimos tiempos. He pasado por distintas etapas de menos a más disposición y de este estado de nuevo a menos. Dentro de exactamente un mes es mi 33 cumpleaños y ya noto por mis venas el miedo a la soledad sentimental. Vuelve la chica del horoscópo más vulnerable, aquella que llevo escondida en lo profundo de mi ser y solo dejo salir tras noches como la de ayer o días como el de hoy, carne de depresión.
No, no lo pienso consentir. Estoy de vacaciones, ni siquiera he agotado el 5 por ciento de ellas. Sí, sí sigo sola, pero puede que como todo tenga una explicación, y que como todo, no la conozca hasta que no llegue el momento. Cada vez que sigo esta vertiente, me late el corazón con fuerza, pues dentro de mi, la chica del horoscópo confía en que lo que sucede, conviene. Además, tiene su deducción, y es la que a ella la conviene: él volverá.

sábado, 1 de agosto de 2009

Agosto

De verdad que llegué a pensar que este día no llegaba nunca. Hoy es uno de agosto y por fin tengo mis vacaciones. Un mes por delante para olvidarme de madrugones, teclados, pantallas, documentación, etc.
La semana ha sido comparable al momento en el que esperas a los Reyes Magos y parece que no fueran a llegar nunca. Sinceramente, un poco desesperante. Pero aquí está y tal como te sucede cuando eres crío y recibes los regalos, mi estado ayer era de puro nervio.
Esta mañana lo he visto más claro, ya he asumido mis regalos y ahora solo me queda empezar a jugar. Puesto que aunque anoche comencé a abrirlos, supongo que a partir de hoy podré disfrutarlos.
Creo que será un agosto atípico, tengo pocas expectativas en cuanto a viajes, tan solo una semana con mis amigas en Cádiz y para eso quedan casi tres. El resto, terminar de acondicionar mi casita e intentar salir todos los fines de semana para desconectar. Apasionante, o no?