domingo, 28 de febrero de 2010

Viento

La noche de ayer fue un calco de la metereología de todo el día. Durante la semana, las noticias fueron alarmantes, debido al paso de una borrasca de gran calado y sobre todo, fortísimo viento. Y si algo hace el viento es agitar, agita pensamientos, personalidades, opiniones y sobre todo caracteres. Yul salió algo alborotada porque su día no había sido uno de los mejores. Y aunque traté de amainar, el viento no dejaba de soplar en nuestra contra: después de una hora casi de búsqueda, logramos aparcar pero lejos del lugar de encuentro con gente que ella conocía, que finalmente no llegaron a aparecer... Encontrado el primer lugar, poco más tarde Beck me llamaba para saber donde nos encontrabamos. Cuando llegó junto con algunos amigos y tras una conversación de lo más monárquica, decidimos cambiar de local. El viento continuaba soplando... Su ímpetu no paró ni siquiera tras pasar algunas horas allí. Sopló y solpló. Sopló y sopló. Aún así... la noche agitada ha dado a luz un día donde como ya se intuía brillaría un sol lleno de fuerza. Casi la misma que el viento de ayer. Así me gusta.

sábado, 27 de febrero de 2010

Treintañer@s

Mi madre dice que cuando una mujer se acerca a los treinta años tiene que tomar una decisión: tener novio o tener criterio. Así comienza el libro que me estoy leyendo y que compré en la Casa del Libro tras encargar dos ejemplares de dos obras que no quedaban. Siempre pico cuando de paseo por los estantes me llama la atención algún título que esconde historias ya demasiado maniqueadas de treintañeras desquiciadas. No lo puedo evitar. Lo vi y lo compré. Pensé que sería diferente, pues en este caso, en lugar de autora desquiciada es autor, por qué no, puede que también sea desquiciado. Es evidente que es de fácil lectura, pues en solo una semana, he avanzado unas 200 páginas. La cosa ahora se pone interesante pues de la treintañera histérica por conseguir un novio modosito aunque le pirrian los cabronazos, hemos pasado directamente al treintañero cabrón de vacaciones en Ibiza. Poder tener acceso al pensamiento de alguien que al plan parejilico tilda como 'plan zeta' por ser ese plan que para el hombre es el último que le gusta llevar a cabo o que aunque su leitmotiv sea la huída del compromiso, una noche relajada piensa en aquella mujer a la que jamás ha podido olvidar... Me interesa, me interesa mucho. Sobre todo, cuando es lunes a primera hora de la mañana y viajas a una nueva semana en un vagón de metro repleto de treintañer@s.

domingo, 21 de febrero de 2010

Yul

Si en algo coincidimos todas es en saber la suerte que tenemos al tenerla como amiga. Es la auténtica definición de lealtad. Yo siempre la digo que admiro su saber estar, su aguante ante las tormentas, su calma ante las dificultades, su entereza ante los problemas. No posee dobleces, ni tampoco personalidades diferentes. Es una de aquellas personas que ha curtido su profesión. Recuerdo el día que fue a visitarme al trabajo con su niño preferido...Nunca había visto a una persona ofrecer tanto a alguien a cambio de una simple sonrisa. Y esa es su visión del entorno, un entorno donde, por su trabajo, ha pesado aquello que para muchos ignorantes son defectos y para gente como ella, no son más que virtudes a desarrollar con entrega, mucha entrega. Alguien así merece en primer lugar reconocimiento, uno a lo grande y tan incondicional como su corazón. Merece que la quieran, uno de esos hombres de verdad, un superhombre, como vaticina ella. Merece cuánto bueno la va a llegar, porque sí, porque debe ser así. Honesta, familiar, en ocasiones terca, pero siempre comprensiva y risueña. Real como la vida misma. Yul es así, para sí y para vos.

domingo, 14 de febrero de 2010

Resilencia

Esta semana he podido saber que el ser humano tiene una capacidad muy considerable para sobreponerse a las adversidades y que esta capacidad se denomina resilencia. Lo he sabido gracias a las entrevistas que el Dr. Rojas Marcos ha concedido a varios medios de comunicación debido a la publicación de su nuevo libro Superar la adversidad. De nuevo, una demostración más de que todo es por alguna razón. Precisamente varios acontecimientos en los últimos días, me han llevado a dudar sobre la posibilidad de no-recuperación ante la constante (im)presencia de alguién que lo significó todo alguna vez. Sin embargo, la psiquiatría dice que no es posible, que toda adversidad, por muy dramática que sea, puede superarse y que dependerá de condiciones como, entre otras, la autoestima, el afecto de tu alrededor, la flexibilidad y por supuesto el tiempo. He ahí el quid de la cuestión: el tiempo. Este, como todo lo importante en la vida, es indefinido, dependerá de la personalidad de cada uno y de lo arraigadas que a sí mismo note esas condiciones. Acabáramos... ¿cuánto será mi tiempo de recuperación? ¿habré comenzado a practicar la resilencia? ¿en qué terminos? ¿para cuando podré darle a play sin atormentarme?

domingo, 7 de febrero de 2010

Genes

Si hay algo que me está empezando a entusiasmar es dejarme llevar. Cuando echo la vista atrás, me doy cuenta que justamente en la medida que no pienso en el después sino que me concentro en el ahora, es cuando todo empieza a encajar. Cuando reflexiono sobre las veces en las que he preferido no controlar la situación (pocas, desgraciadamente muy pocas), ha estado siempre mejor de lo que esperaba. Y sobre todo, cuando por cualquier circunstancia, decido pensar en mi antes que en cualquier otr@, es precisamente cuando se me concede el galardón. Algo así debió pasar anoche. Si alguien me hubiera soplado al comenzar la noche que acabaría charlando y bailando con el tipo más exótico del garito en el que los hombres están fabricados bajo el mismo molde, no me lo hubiera creído. Pues fue así. Tal cuál(ing), como diría Yul. La mezcla es perfecta: padre árabe, concretamente de Dubai y madre francesa, de Montpeliere. Modelo y decorador de interior. Cinco idiomas y a punto de conquistar Japón. Buahhh!!! Espectacular. Hubo un momento en el que hubiera matado por tener una hija con él. De verdad, ni por un instante deseé besarle, ni siquiera tocarle. Solamente deseaba hacerme con sus genes!!!!. Después, hubiera caminado tranquilamente hasta la primera clínica de fertilidad que me hubiera asegurado que tras su inseminación, me quedaría embarazada. ¿Cómo se puede desear tener un hijo con alguien sin ni siquiera desear besarle? Este mundo moderno, de verdad que me puede.

sábado, 6 de febrero de 2010

Despedida

Anoche nos reunimos para despedir a Marty. Hace un tiempo que buscaba trabajo y lo ha encontrado lejos de aquí. En apróximadamente diez días se instalará en Londres para comenzar una nueva etapa en un país diferente del que hasta ahora la había acogido. Aunque hubo algo de preparación días antes del evento, es verdad que también hubo mucho de improvisación, aunque Yul y yo tratamos de que todo saliera desde el inicio lo mejor posible. Siempre exigente, Marty no se conformó con que ambas, Yul y yo, nos retiraramos antes, pues la fuerza de la costumbre que llevo acarreando bastante tiempo atrás y que me supone no salir los viernes, hizo que a partir de las tres de la mañana no pudiese con mi alma. Muy en el fondo, estoy segura que Marty nos comprendió... entre otras cosas porque hasta este momento, muchos han sido los eventos que hemos compartido y de esos ha habido algunos en los que ha sido ella la que primero se ha retirado o ni siquiera ha acudido. Además, aunque por el momento no tengo noticias ni de ella ni de Beck o Nita, quienes decidieron quedarse un rato más, seguramente pudieron bailar, visualizar, y quién sabe, incluso intercambiar con algun desconocido alguna que otra sonrisa. Ya lo dice Marty: Nunca se sabe, nunca se sabe...