domingo, 29 de agosto de 2010

Reconstrucción

A dos días que culmine el mes de agosto, a tres de comenzar de nuevo a trabajar y a cuatro de cumplir un año más, como si de una premonición, o mejor aún de una síntesis se tratara, acabo de escuchar uno de los cd's que más olvidado tenía, el de Deluxe y su Reconstrucción. Dice Xoel en esta canción que este

Es el mejor momento,
asumir que toda sabiduría y experiencia
no resisten a veces
la fuerza de algunas corrientes...

Me quedo con esta estrofa porque si que es verdad que es el mejor momento para hacer balance y sobre todo para plantearse nuevos objetivos. También para reconocer el paso por corrientes dolorosas, que pusieron una y otra vez a prueba la resistencia del alma mía. Pero sobre todo es el mejor momento para culminar una reconstrucción que como otras muchas en la vida comenzó sin querer y porque tras examinar opciones, la de reconstruirse era la sobresaliente, la que había que escoger. El camino está andado, y aunque las fuerzas flaquean debido al esfuerzo tras el severo recorrido, la certeza de que existe un nuevo paisaje por descubrir, me anima a abrir de una vez por todas la ventana desde la que se vislumbra y que además se encuentra recientemente reformada.

sábado, 21 de agosto de 2010

Jueves

El jueves aprovechamos la estancia en Madrid en pleno agosto para acercarnos a local de Claudio Coello. Y aunque la apatía que provoca la ciudad vacía nos contagió el ánimo, fue por muy poco tiempo. En cuanto elegimos el lugar adecuado en el sitio convenido la cosa cambió... y tanto!. Yul y yo descubrimos que las canas nos gustan, y cuantas más, pues mejor. Como suele pasarnos, a medida que la noche avanzaba, el grupo iba siendo más numeroso. Las risas y el tonteo fueron los verdaderos protagonistas. Como segunda actriz, la ilusión. Pero como actriz secundaria, la mala de la peli, la desesperanza. La primera parte de esta saga no acabó como nos imaginamos, pero está claro que como todas las sagas cinematográficas que se precie, se rodará una segunda parte, y quien sabe si dependiendo de los beneficios, incluso una tercera.
El próximo jueves en los mejores cines...

sábado, 14 de agosto de 2010

Vacaciones

De vuelta de la playa, hoy hace un año exacto que el popero volvía a aparecer en mi vida. Entonces, no me había ido todavía. Hoy, ya he vuelto. Volvimos el jueves, tras una intensa semana en la que no hemos dejado ni un solo día de relacionarnos con gente nueva, desde lugareños con muy mal perder hasta cachondos sevillanos, pasando por catalanes y madrileños venidos del extrarradio. Pero estas vacaciones han servido para algo más. El viaje a la isla de Gran Canaria ha servido para que si cabe, Yul, Marise y yo nos conocieramos más. La convivencia hace transparente a quien la comparte y pone a prueba la amistad día sí y día también. Compensa porque sin momentos chungos no existen momentos brillantes y porque al fin y al cabo el mundo social está compuesto por micromundos donde compartir, ser, estar, decir y por qué no maldecir está a la orden del día. Y solamente el todo, refuerza las partes, las aporta y las hace más versátiles, las reconoce y las enfrenta al duro espejo de la realidad, ora desgarradora, ora divertida. Así de extremista, así de radical. Y lo digo yo, ejemplo de ello y orgullosa de serlo porque tras la reflexión oportuna no veo posible ser quien soy en los mejores momentos sin haber vivido y compartido los peores. Y vuelta al reflejo: no hay cielo sin infierno, ni alegría sin tristeza, ni gloria sin sufrimiento. Queramos o no el mundo y sus micromundos están hechos de polos opuestos. Sin términos medios. A estos recurren a menudo tan solo los mediocres. Aaaargg!

domingo, 1 de agosto de 2010

Mismo

Anoche cerramos temporada y decidimos hacerlo en el lugar donde si las paredes hablasen. El final resultó ser un auténtico déjà vu de nada menos que de cinco años atrás. Los mismos con las mismas en el mismo lugar. Solamente faltaba para cerrar el círculo de auténtica ciencia ficción, Anel. Lo mejor fue cuando mi mismo recordaba en mi presencia que habíamos hablado en otra ocasión. Lo confirmé: me encontraba en uno de los mejores déjà vu de mi vida. En vivo y en directo, ambos conectamos y nos trasladamos al mismo momento. Viví el instante con el que seguro comenzaré el corto que algún día dirigiré.
La noche del viernes también fue mencionable. Una noche de reencuentros, de anécdotas del pasado y de planes de futuro. Nada mejor ni más recomendable para comenzar el período vacacional como cenar con antiguas amistades y reconocer que lo bueno existe y por suerte se encuentra muy próximo a uno.